Obispos enfatizan que no hay tiempo que perder y es la hora para el cambio del país
La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) reiteró su llamado a la Fuerza Armada a sentirse parte del pueblo, al que deben defender y servir. Denuncia la comisión de delitos de lesa humanidad bajo el amparo del gobierno de Maduro
La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) enfatizó que en medio del colapso que vive el país no puede demorarse más el cambio exigido por el pueblo.
«No hay tiempo que perder: es hora para el cambio exigido por la inmensa mayoría de los venezolanos, para el encuentro, para la apertura de mentes y corazones. Invitamos a salir de su oscuridad a quienes están atentando contra los hermanos con delitos de lesa humanidad. Es necesario tender puentes y derribar muros de división, en la edificación de una patria que sea casa para todos. Es nuestro desafío, ¿Lo asumiremos?», enfatizaron los obispos en un mensaje enviado este martes 2 de abril desde la sede de la CEV.
El clero manifestó su preocupación por los efectos generados por los recurrentes apagones en todo el ámbito nacional, los cuales, destacan, agudizan aún la crisis de suministro y conservación de los alimentos y medicinas. Añaden que el pueblo sufre por el agravamiento del problema de la falta de agua potable que amenaza con degenerar en una catástrofe sanitaria.
Los obispos censuran la respuesta que han recibido los ciudadanos que protestan ante la crisis: «Resulta grave, ilegal e irresponsable el llamado a los colectivos a reprimir a la gente cuando reclama legítimamente sus derechos fundamentales» .
La CEV rechaza el irrespeto de los derechos humanos y la comisión de delitos humanos que, enfatizan, ha ocurrido en el país «bajo la mirada complaciente de las autoridades»del gobierno de Nicolás Maduro.
Señalan que muestra de estos atropellos son el genocidio de los indios pemones y otros indígenas del sur del país, a quienes también se les ha irrespetado su cultura, la deportación forzosa de colombianos y venezolanos; la detención irregular de personas y la tortura que se realiza en contra de los detenidos por motivos políticos; además de «la imposición intencional de condiciones de vida como la privación del acceso a alimentos o medicinas».
Asimismo, en el comunicado de este martes 2 de abril, los obispos venezolanos recuerdan a la Fuerza Armada Nacional (FAN) su deber constitucional: “En el cumplimiento de sus funciones, está al servicio exclusivo de la Nación y en ningún caso al de persona o parcialidad política alguna”. También reiteran su llamado a la organización castrense sentirse parte del pueblo, al que deben defender y servir, «actuando de acuerdo a su propia conciencia».
Por otra parte, señalan que «el pueblo está cansado de tantos engaños. El Episcopado hace suyo el contenido y la intencionalidad de dichos mensajes. Más aún, tanto lo dicho por los hermanos Obispos como los mensajes de la Conferencia expresan el sentir del Santo Padre Francisco».
Subrayaron los obispos que, como pastores, interpretan las angustias que viven los venezolanos y afirmaron que «María, Madre Dolorosa, acompaña el Vía Crucis que vive nuestro pueblo en la esperanza de la liberación pascual realizada por su Hijo Jesucristo».