ONG exigen al Estado sancionar hechos de violencia contra comunidades indígenas
La ONG Fundaredes destacó que el recrudecimiento de la violencia en el estado Amazonas en los últimos años «ha generado una vulnerabilidad de las comunidades indígenas asentadas en este territorio, las cuales se ven afectadas por la actuación de los grupos armados irregulares que controlan la minería ilegal»
Civil Rights Defenders, Fundaredes y la asociación civil Kapé Kapé le recordaron al Estado venezolano la necesidad de protección de comunidades indígenas, debido a los hechos de violencia en el estado Amazonas relacionados con presencia de grupos irregulares y personas dedicadas a la minería ilegal.
Desde Civil Rights Defenders mostraron su preocupación por la desaparición de indígenas yanomami, los asesinatos ocurridos en la localidad de Parima B y el bloqueo de información. La AC Kapé Kapé recordó que todavía no hay imputados por el asesinato de cuatro personas pertenecientes a esa etnia.
#Venezuela | Seguimos con preocupación la situación de Derechos Humanos en la comunidad indígena de #Yanomami, donde se denuncia desaparición de jóvenes, asesinatos y bloqueo de acceso a la información. Exigimos a autoridades de ese país esclarecer los hechos y respetar los DDHH. pic.twitter.com/GjhI7DKyCu
— Civil Rights Defenders Latin America (@CRDLatin) April 26, 2022
Mientras que la ONG Fundaredes destacó que el recrudecimiento de la violencia en el estado Amazonas en los últimos años «ha generado una vulnerabilidad de las comunidades indígenas asentadas en este territorio, las cuales se ven afectadas por la actuación de los grupos armados irregulares que controlan la minería ilegal».
Las investigaciones realizadas por @FundaRedes_ demuestran cómo la violencia en los estados del sur de Venezuela es propiciada por la guerrilla del ELN y las Farc que se han expandido en estos territorios para controlar la extracción minera. https://t.co/zjM9NuRIKl
— FundaREDES (@FundaREDES_) April 26, 2022
Fundaredes ha identificado la presencia del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y disidencias de las FARC en los territorios al sur del país, especialmente en Bolívar y Amazonas, para controlar la actividad minera en esas zonas.
Además del asesinato de cuatro indígenas yanomami, se han registrado confrontaciones entre estos grupos armados y comunidades al sur de Amazonas. La última ocurrió el sábado 23 de abril en la comunidad de Cupaven (municipio Atabapo, estado Amazonas), donde fueron heridos tres habitantes.