Vacunas: claves para abordar un tema global, por Mónica Nieves y Magdalena Bas Vilizzio
Twitter: @Latinoamerica21
Con el inicio de la vacunación contra la covid-19, el 2020 finalizaba proyectando el primer paso hacia el fin de la pandemia. Sin embargo, el 2021 ha planteado nuevas incertidumbres y desafíos. Partiendo de la idea de «una salud» humana, animal y del planeta, la expansión del virus se enraíza en inequidades previas que se reflejan en débiles sistemas de salud, informalidad laboral o acceso a la educación, al tiempo que pone al descubierto los efectos del cambio climático.
Ante la crisis del multilateralismo, de la covid-19 y de la globalización ¿Cuáles son las claves de la disputa por las vacunas?
La seguridad humana
La primera clave es la seguridad humana, aunque las medidas colectivas y nacionales presentan claroscuros. Mientras las muertes continúan aumentando, la apropiación «masiva» de las vacunas por parte de ciertos Estados da cuenta de nuevas formas de inequidad global.
Según el anuario del Centro de Educación e Investigación para la Paz (Ceipaz), el médico Fernando Lamata sostiene que los países más ricos, que representan al 14% de la población mundial, han acaparado el 84% de las vacunas, lo cual podría catalogarse como un «apartheid vacunal». Además, el mecanismo Covax, creado para la compra y distribución de las vacunas a países en desarrollo, terminó siendo una «linda idea que se quedó corta», como señala la periodista Ann Danaiya Usher en The Lancet.
Los claroscuros también se aprecian desde el lente de la geopolítica con la llamada «diplomacia de las vacunas», instrumentada a través de las donaciones de Estados desarrollados a otros en desarrollo, tal como se anunció en la última cumbre del G7.
Si bien estas medidas ayudan a construir el andamiaje para situaciones de urgencia, son puntuales y parciales y no resuelven el problema de fondo, al tiempo que profundizan las relaciones asimétricas centro-periferia.
Teniendo en cuenta que menos del 25% de la población mundial recibió al menos una dosis, las grandes diferencias entre continentes y que aún se requieren unos diez mil millones más para lograr la inmunidad de rebaño a escala global, la decisión del G7 de donar mil millones de dosis resulta insuficiente.
La gobernanza global
La segunda clave es la gobernanza global, tanto a nivel de salud como de comercio, porque la regulación del mercado es fundamental en términos de propiedad intelectual y vacunas. En este marco, algunas acciones multilaterales han propuesto alternativas auspiciosas. Entre ellas, la reciente resolución sobre el Fortalecimiento en la preparación y respuesta de la Organización Mundial de la Salud frente a emergencias sanitarias, donde se evidencia la necesidad de crear normas internacionales que protejan la seguridad humana.
*Lea también: Abdala: candidato vacunal, no vacuna, por Gioconda Cunto de San Blas
En materia de comercio internacional, en la Organización Mundial del Comercio (OMC) se ha discutido la propuesta de India y Sudáfrica sobre la suspensión temporal de derechos de propiedad intelectual de la vacuna y otros productos y tecnologías vinculadas a la covid-19. La propuesta es apoyada por cerca de una centena de países de renta media y baja.
Después del rechazo inicial, Estados Unidos, el Parlamento Europeo, China y otros Estados están dispuestos a discutir el tema y en la última reunión en la OMC se decidió seguir ese camino. ¿Es la gobernanza global eficiente? ¿Discutir el tema es suficiente? No, pero los cambios se inician con una discusión.
La ausencia de normas internacionales
La gobernanza global descansa en el derecho internacional, como conjunto de normas que se encargan de construir un espacio público donde las voces de los más débiles sean escuchadas, como afirma el jurista finés Martti Koskenniemi. Por tanto, la tercera clave para comprender el tema se encuentra en el derecho internacional.
¿Por qué es necesaria una discusión jurídica sobre los derechos de propiedad intelectual relacionados con el comercio en medio de una emergencia sanitaria global? La clave tal vez no sea el derecho internacional sino su ausencia.
No existen normas internacionales en materia de pandemias o sindemias —la suma de dos o más epidemias— que establezcan límites a la propiedad intelectual en caso de una emergencia global.
Por lo tanto, se celebra la propuesta de un instrumento internacional para la preparación ante futuras pandemias, patrocinado por la Organización Mundial de la Salud, el presidente del Consejo Europeo y más de 30 jefes de Estado. Esto demuestra que para un asunto global la respuesta necesariamente debe (y deberá) ser global. Y a pesar de que el recorrido jurídico apenas se inicia y de que es imprescindible potenciar el multilateralismo para darle recorrido, el documento pone de manifiesto la necesidad de fortalecer el derecho internacional frente a acciones individuales.
Otras opciones para salir de la crisis
Ahora bien, frente al creciente peso de las empresas transnacionales, surgen otras opciones para la fabricación de vacunas que se basan en la colaboración entre el sector público y el privado: la denominada «tercera vía». Estas ideas, citadas por la economista Mariana Mazzucato en su libro El Estado emprendedor, se acercan a lo que hoy está haciendo AstraZeneca.
La capacidad productiva de algunos países de América Latina y el Caribe —Argentina, Brasil, México, por ejemplo— podría viabilizar alternativas ante un factor apremiante como el tiempo. Sobre todo, teniendo en cuenta los plazos de la discusión en la OMC, así como de los procesos de transmisión del know how y la logística que se requerirán a posteriori, en caso que la suspensión temporal se concrete.
En suma, es necesario abordar tres aspectos para alcanzar la accesibilidad de las vacunas: los claroscuros de la protección de la seguridad humana, la ausencia de normas internacionales y los desafíos de una gobernanza global eficiente. Abordar estos tres aspectos de forma multilateral constituye la base para construir resiliencia en un mundo cada vez más inequitativo y vulnerable.
Mónica Nieves es profesora de la Universidad de la República, Uruguay. Magister en Relaciones Internacionales por la Universidad de la República. Es co-responsable del Espacio de Relaciones Internacionales e Interdisciplina.
Magdalena Bas es profesora de la Universidad de la República, Uruguay e integrante del Sistema Nacional de Investigadores. Doctora en Relaciones Internacionales por la Univ. Nacional de La Plata (Argentina).
www.latinoamerica21.com, un medio plural comprometido con la divulgación de información crítica y veraz sobre América Latina.
TalCual no se hace responsable por las opiniones emitidas por el autor de este artículo