Casi 300.000 familias dejaron de recibir el CLAP en siete meses
Casi cuatro millones y medio de familias no recibieron el CLAP en julio de las 6,15 millones, aproximadamente, que están registradas en el sistema, de acuerdo con la ONG Ciudadanía en Acción
Edison Arciniega, director ejecutivo de la Organización No Gubernamental (ONG) Ciudadanía en Acción, presentó el balance de la situación alimentaria en el país durante el primer semestre de 2021, destacando que el tema del aporte público distribuido a través de la Comité Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) ha mantenido la «inercia decreciente de 2020».
«En el transcurso del primer semestre de 2021 el programa CLAP alcanzó a cerca de un tercio de los venezolanos, es decir, en términos de penetración redujo su presencia y relevancia (…) Inició el año con una cobertura por el orden de los 2.032.000 familias receptoras, para cerrar en julio en 1.738.000 familias beneficiarias», explicó en rueda de prensa.
En el sistema CLAP hay registradas unos 6,15 millones de hogares, aproximadamente, lo que significa que 71,8% (4.412.000) de estas no recibieron la caja en julio.
En cuanto a la periodicidad, tiempo que tarda en llegar a quienes está abarcando, dijo que hubo una variación cercana de 52,50 días a 65,73 días. Agregó que el promedio de tiempo que se tarda en llegarle a un hogar puede ser superior a 3,5 meses.
Además, subrayó que el promedio de cajas es de 1,01 cajas, es decir, casi ninguna familia recibe más de una caja, lo que, a su juicio, apunta a que las familias con más vulnerabilidad y riesgo alimentario no están recibiendo complementación.
«Ha perdido encaje y penetración con la disminución de familias que se alcanza, y el número global de cajas se redujo en unas 300.000 cajas», enfatizó.
*Lea también: ¿Qué dice el informe reclasificado por la CPI del examen sobre Venezuela?
Disposición alimentaria general
En cuanto al sistema privado de distribución de alimentos, el sociólogo manifestó que el país paradójicamente, en un momento en que se reduce el aporte público, pasó de 594.000 toneladas métricas de alimentos, disponibles en enero, a 667.309 toneladas métricas en junio. Explicó que se registra «un incremento sostenido, tibio, pero sostenido en disposición de alimentos en Venezuela».
El director de Ciudadanía en Acción atribuyó esto fundamentalmente a la oferta de alimentos por parte del sector privado. Aclarando que si bien creció la oferta de alimentos y el consumo, Arciniega sumó que lamentablemente no se estimuló la disposición de alimentos de origen primario, en este momento cerca de un tercio de anaquel de productos frescos es importado, cifra récord en la historia de consumo nacional.
«El sistema alimentario venezolano registra recuperación, tendencia positiva, por vía del aporte del mercado de alimentos internacionales (…) Esta superación tímida, pero progresiva, nos permite ir superando la inseguridad alimentaria aguda que enfrentaba el país en 2018», sostuvo.
Sin CLAP para pueblos originarios
Al menos 130 familias del pueblo indígena barí denunciaron haberse quedado sin acceso a las bolsas de alimentación en el municipio Jesús María Semprum, ubicado en una zona fronteriza del estado Zulia.
La comunidad responsabilizó de esta exclusión a la alcaldesa Keinireth Fernández, quien habría ordenado no repartir más alimentos como método de «soborno» antes de las elecciones primarias del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), que se llevaron a cabo el pasado 8 de agosto.
Según la denuncia, la alcaldesa habría impedido que los indígenas votaran en las primarias que enfrentaban a precandidatos del PSUV.
«El día 8 de agosto no ejercimos nuestro derecho a votar. Nosotros no votamos. Hubo 400 barí que no votaron en Jesús María Semprúm. Quiero que usted (Nicolás Maduro) investigue qué pasó. Hubo actos de violencia, hubo terrorismo. No queríamos salir heridos, por eso no votamos», denunció un miembro de la comunidad.