#TalCualVerifica las 10 promesas de Maduro para recuperar la economía
El último plan de recuperación económica propuesto por Nicolás Maduro tampoco generó estabilidad. A un año de las medidas, la crisis se mantiene, pero con más inflación, más devaluación, más depresión económica, desprecio por el bolívar, más caída del consumo y de los ingresos
Ahiana Figueroa y Carlos Seijas Meneses
En el último año el bolívar perdió 99% de su valor, el salario mínimo cayó a 2 dólares, los efectos de la reconversión monetaria se esfumaron, la hiperinflación siguió deteriorando la calidad de vida de la población y se profundizó la dolarización de facto. Ese es el resultado del programa lanzado por el gobierno en agosto de 2018, que tenía como objetivo principal recuperar la ya deprimida economía del país.
«Ha llegado la hora. Lo vamos a hacer y lo vamos a hacer bien», dijo Nicolás Maduro la noche del 25 de julio de 2018 al reconocer que necesitaba implementarse un plan de recuperación de la economía, la cual según el Banco Central de Venezuela (BCV) acumulaba una contracción de 52,3% desde que el gobernante asumió la presidencia en 2013.
Maduro bautizó ese plan con el despampanante nombre de «Programa de recuperación económica, crecimiento y prosperidad», el cual arrancaría el 20 de agosto de 2018 con la entrada en vigencia de la segunda reconversión monetaria implementada por el chavismo en apenas una década, que eliminaría otros cinco ceros al bolívar.
«Semejante título» del plan de Maduro hizo suponer que ahora sí presentaría una política económica sistémica para enfrentar la recesión de cinco años, la hiperinflación que llevaba 10 meses, el derrumbe operacional y financiero de Pdvsa y la desnutrición y falta de medicamentos que lacera la vida de los más pobres, niños y ancianos, afirma el economista Rodrigo Cabezas, ministro de Finanzas entre 2007 a 2008. «Pero no fue lo esperado».
Tras el lanzamiento del programa económico, autopistas y avenidas de toda Venezuela se llenaron de vallas publicitarias que anunciaban la reconversión, los objetivos de todas las medidas que conformaban el plan, y los beneficios que obtendrían los venezolanos al «proteger» sus ingresos con la moneda digital petro y los lingoticos de oro.
A juicio del economista Jesús Casique, la administración de Maduro continuó tomando medidas contrarias a las requeridas para estabilizar la economía. «Venezuela no está en recesión, está en lo que se denomina una etapa de depresión económica. El gobierno tomó medidas que afectaron significativamente al sector privado que ya de por sí se encontraba en crisis, tales como las reformas tributarias, el encaje legal a la banca de 100% y los anclajes del salario mínimo al valor del petro».
El 22 de agosto, dos días después de iniciado el programa de «recuperación», Maduro ofreció detalles sobre el plan: dijo que lo conformaba una decena de líneas de acción que apuntaba a estabilizar la economía. Sin embargo, Venezuela no ha podido contener la caída de su Producto Interno Bruto y ha habido una profundización en la caída de los bienes y servicios, afectados aún más por la crisis eléctrica y escasez de combustible, sostiene el economista Leonardo Vera.
Recuperación no ha habido, lo que ha pasado es la profundización de la depresión económica que Venezuela sufre desde hace cuatro años. La actividad económica ha caído por cinco años consecutivos y lo que se prevé según cálculos de la Cepal es una caída de 35% para 2019 y de 10% para 2020, por lo que Venezuela estaría batiendo un récord mundial en materia de catástrofes económicas», apuntó Vera
En TalCual revisamos las 10 líneas de acción presentadas por Maduro y verificamos si los objetivos de cada una se cumplieron o no a un año del plan:
1. Equilibrio fiscal y tributario
Maduro tenía como objetivo lograr el equilibrio fiscal y tributario. «Ya la Asamblea Constituyente (ANC) aprobó las leyes tributarias, con eso recaudaremos mucho más dinero, para financiar los sueldos y salarios, inversiones en educación, salud, vivienda, es para el desarrollo social del país y sustentar así de esta manera, con moneda real producida en el país y recaudada por el sistema tributario».
Para lograrlo se hizo una reforma de la Ley del IVA para elevarlo de 12% a 16%, mientras que los bienes considerados de lujo pagan 16% por la alícuota general del IVA y un 15% adicional. Anteriormente, estos productos cancelaban 10% y 15%, respectivamente. Se estableció el pago anticipado del ISLR y del IVA sin tomarse en cuenta cuánto podrían ser las ventas; además del pago de anticipo de 1% del ISLR para los contribuyentes especiales.
El resultado hasta ahora con la recaudación tributaria ha sido una merma en términos reales debido a la inflación, la cual hace menos efectivo los ingresos, es decir, así como ha disminuido la capacidad de compra del salario de los trabajadores, también ha caído la capacidad que tienen los recursos del sector público para financiar proyectos.
De acuerdo a cifras de la firma Econométrica, los ingresos en términos reales del Seniat presentaron una caída en el segundo trimestre de 2019 de 73%, en buena medida como resultado de la dolarización de facto y del efecto Olivera-Tanzi, donde los pocos bolívares percibidos son erosionados por la inflación. El Impuesto sobre la Renta (ISLR) cayó 55%, mientras que lo recaudado por Impuesto al valor Agregado (IVA) disminuyó 73%.
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«En cuanto al compartamiento de la recaudación fiscal bajo la jurisdicción del Seniat, se espera que continúe su curso en terreno negativo. A pesar de la baja inflación de los últimos meses, el país sigue inmerso en una espiral inflacionaria y sin señales de ningún plan de ajuste en el corto plazo que pueda revertir esta situación, por tanto, la inflación puede acelerarse en los próximos meses», resaltó Econométrica.
Las medidas adoptadas en este sentido versaron en una reforma de la Ley del IVA en la que los bienes considerados de lujo pagan 16% por la alícuota general del IVA y un 15% adicional. Anteriormente, estos productos cancelaban 10% y 15%, respectivamente. También hubo un aumento de la tasa del IVA de 12% a 16%, además del pago anticipado del ISLR y del IVA sin tomarse en cuenta cuánto podrían ser las ventas de los comercios. Además de un pago de anticipo de 1% del ISLR para los contribuyentes especiales.
2. Nuevas política cambiaria
La segunda medida fue impulsar una nueva política cambiaria para que el país se liberara de la renta petrolera, lograra un nuevo equilibrio y derrocara el «dólar criminal».
En la primera subasta del Dicom luego de la entrada en vigencia de la reconversión, el tipo de cambio fue de 60,27 bolívares por dólar. Pero el reformado esquema de asignación de divisas duró nueve meses. En mayo de 2019, el BCV autorizó a la banca la compra y venta de divisas a través de mesas de cambio, medida que decretó la muerte del Dicom, que ya presentaba problemas por la escasa oferta de divisas y luego de las sanciones del Departamento del Tesoro al restringir las transacciones del BCV en EEUU.
El 22 de agosto de 2019, un año después de la primera puja del nuevo Dicom, la tasa de apertura para las mesas de cambio fue de 15.684 Bs./$, lo que representa un incremento anual de 25.924% y una devaluación del bolívar de 99,61%.
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Las mesas de cambio es un esquema que todavía no ha calado en la economía. Según Ecoanalítica apenas mueven 5% de lo que se negocia en el mercado paralelo, lo que evidencia que los intentos del gobierno de liberar la economía para hacer desaparecer el “dólar criminal” e incentivar a las personas a que transen divisas en el mercado oficial no han logrado generar confianza en los agentes económicos.
Esos intentos han sido la «derogación» de la Ley de Ilícitos Cambiarios; el Convenio Cambiario N° 1, que permite la libre convertibilidad de la moneda en todo el territorio nacional; y la Resolución 1905-01 del BCV, que autoriza la libre compraventa de divisas entre privados a través de la banca.
3. Salarización de los ingresos anclados al petro
La tercera línea de acción consistía en “defender” el salario de los venezolanos. “Nosotros ponemos el trabajo, el salario, los trabajadores y las remuneraciones del trabajo como centro del proceso de reequilibrio y recuperación productiva y generación de riqueza”, dijo Maduro antes de fijar el salario mínimo en medio petro, una moneda digital creada por el Ejecutivo en diciembre de 2017.
El gobierno explicó que el valor de la moneda digital dependería de un “índice compuesto por una canasta de los commodities representativos de la riqueza del subsuelo venezolano (petróleo, oro, hierro y diamante)”. Sin embargo, expertos aseguran que el Ejecutivo ha determinado el valor del petro de manera administrativa, discrecional y como mejor le plazca.
Durante el plan económico, el gobierno aumentó el precio del petro tres veces: en diciembre de 2018 de 3.600 a 9.000 bolívares, en enero a 36.000 y en abril a 80.000 bolívares. El precio de la moneda digital lleva más de cuatro meses sin ser ajustado, por consiguiente, igual el salario, que desde el 16 de abril se mantiene en Bs. 40.000 (medio petro).
El sueldo mínimo ha sido aumentado cuatro veces desde que Maduro puso en marcha el programa: a Bs. 1.800 en septiembre del año pasado, a Bs. 4.500 en diciembre, a Bs. 18.000 en enero y a Bs. 40.000 en abril. Cuando el gobernante anunció el primero de estos cuatro aumentos, el 17 de agosto de 2018, el salario mínimo equivalía a 30 dólares al tipo de cambio oficial de Bs. 60.
Un año después, el ingreso mínimo que perciben al menos unos tres millones de venezolanos son apenas 2,5 dólares al tipo de cambio oficial (15.684,78 Bs/$) del 22 de agosto, por lo que se encuentran en situación de pobreza extrema, según parámetros de Naciones Unidas. Son, además, 27,5 dólares menos que hace un año.
4. Estabilizar los precios de los productos básicos
Estabilidad de los precios, vinculado al costo real de producción y vinculado al tipo de cambio. Para ello, el gobierno acordó el ajuste de los precios de 25 productos de la cesta básica. «Vamos al Plan 50 y esos precios el pueblo debe hacerlos respetar y denuncien a quien viola los acuerdos, para enviarles el Sebin», sentenció Maduro.
Aunque esta medida mejoró el abastecimiento y los anaqueles dejaron de mostrarse vacíos, el bajo ingreso de los venezolanos no permite el acceso a los bienes. De hecho, la Asociación Nacional de Supermercados y Autoservicios (Ansa) calcula que ahora los consumidores cuando van al mercado apenas pueden llevarse en promedio cuatro productos, cuando antes compraban 16 artículos.
Por su parte, el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM) reportó que el precio de la Canasta Alimentaria Familiar de julio de este año fue de Bs. 3.247.472 lo que significa un alza de 47.767% desde julio de 2018. De allí que se requieren 81,2 salarios mínimos (Bs. 40.000) para poder adquirir la canasta alimentaria, referida a una familia de cinco integrantes.
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El economista Leonardo Vera resalta que la liberación de precios se ejecutó en un ambiente en el cual hay una merma en el mercado, cuando la capacidad adquisitiva y el consumo ha caído, por lo que las empresas se han visto obligadas a mantener un flujo de caja más por márgenes que por volúmenes. «La dinámica que observo es que vamos a seguir viendo una disminución del consumo si no hay un reajuste efectivo de los salarios. Esto se traduce en menos ventas para el comercio, menos ingresos, menos flujo de caja y menos posibilidad de seguir pagando nómina., por lo que las empresas tendrán que crear estrategias para enfrentar esa caída».
5. Elevar la producción nacional
«Producción, en este punto pido el compromiso del congreso constituyente y del liderazgo de cada sector, para elevar la producción y la generación de riqueza en petróleo, petroquímica, oro, diamante, coltan, cobre, hierro, aluminio, cemento, agricultura entre otros, elevar la producción de riqueza material y monetaria, así como también de alimentos y servicios públicos», afirmó Maduro. Su idea, luego de 20 años de chavismo, es la de «construir un modelo empresarial para la construcción del socialismo».
Sin embargo, Venezuela cada mes produce menos crudo. Actualmente el país ocupa el décimo puesto en extracción de petróleo de los 14 países miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo. En agosto de 2018, la producción se situó en 1,23 millones de barriles diarios (bd), mientras que el bombeo de crudo de julio de este año fue de 742.000 bd, una caída de 39,6% (488.000 bd) en once meses.
En el sector privado, se observa cada vez más el cierre de empresas. Según recientes datos de Conindustria, 80% de las empresas paró o disminuyó su producción en el segundo trimestre de 2019. Debido al impacto de un año marcado por apagones eléctricos y escasez de gasolina, las empresas activas operan al 19% de su capacidad instalada.
«Es extremadamente bajo», dijo Adán Celis, frente a industrias de países como Colombia con 81% de uso de su capacidad. Otros datos del sector revelan que 80% de las compañías cerraron desde el año 1999.
El sector agropecuario no se escapa de la crisis. De acuerdo a Fedeagro, la producción nacional tiene 12 años de caída sostenida y alertan que seguirá cayendo este año, pues no hay medidas para revertir la situación y recuperar la producción. El presidente del gremio, Aquiles Hopkins alertó que el sector abastecía 70% del consumo nacional de alimentos y ahora solo 20%; mientras que voceros de Fedenaga señalan que el sector ganadero solo cubre 35% de las necesidades del país y trabaja a 35% de su capacidad instalada.
6. Aumentar los ingresos en divisas
«Garantizamos en el plan de ingreso de divisas y estabilidad un mapa de ingreso ordinario y extraordinario, para sostener este programa de recuperación económica hasta diciembre de este año y ya tengo el plan para la generación de divisas necesarias de estabilidad para todo el 2019, tengo los recursos para el funcionamiento de este programa», prometió Maduro.
Desde hace varios años, pero especialmente desde 2018, los ingresos en divisas del país se han desplomado. La constante caída de la producción petrolera de Pdvsa ha generado menos recursos. Según Ecoanalítica, el país dejó de percibir $38.325 millones por este concepto.
«En el 2018 el 97,8% de las dólares que ingresaron al país por exportaciones petroleras se quedaron en manos de Maduro. Tan solo el 2,2% de los ingresos fueron vendidos a los ciudadanos. Desde hace mucho tiempo Maduro ha impuesto un embargo de divisas sobre los venezolanos», apuntó el economista Alejandro Grisanti, integrante de la junta directiva ad hoc de Pdvsa.
Por otra parte, las reservas internacionales del BCV aún no recuperan los montos que otrora vez tuvieron. Hasta el pasado 21 de agosto se mantienen en $8.173 millones, cifra que ostentan desde junio de 2018. Mientras que desde agosto de 2018 reflejan un aumento de 9,9% al cerrar ese período en $7.435 millones.
7. Consolidación del petro
Nacido con la idea de «vencer el bloqueo financiero de EEUU» y pagar importaciones , el petro ha sido un verdadero ‘criptofiasco’. «Aspiro que en un corto plazo los venezolanos tengan acceso directo al petro, para que realicen sus compras internacionales, invertir con ello en un viaje, una casa, un carro».
Hasta la fecha, el petro ha sido autorizada y usada en algunas ocasiones solo a lo interno del país para pagar impuestos, habitaciones de hotel y bienes en algunos comercios, salarios a funcionarios y bonos a los inscritos en el carnet de la patria.
Los conocedores de criptomonedas afirman que el petro está ausente en todas las grandes exchanges o casas de cambio internacionales, como Binance o Coinbase donde los usuarios compran y venden cualquiera de las más de 2.300 criptodivisas que existen en el mercado menos petros.
Varios analistas aseguran no saber de alguna empresa extranjera que esté negociando con Venezuela en petros. El gobierno tampoco ha informado de alguna transacción o pago con petro de sus importaciones. Y el futuro la criptodivisa es más oscuro todavía, puesto que el gobierno de Donald Trump vetó las operaciones en petro a los estadounidenses o a quienes se encontraran en ese país por considerar que era un intento de burlar las sanciones económicas que ha impuesto a la administración de Maduro.
8. Mejorar el transporte
“Pido a la dirección sindical revolucionaria que hagamos un esfuerzo superior del transporte; no vamos a permitir que nos sigan robando las mafias colombianas la gasolina. ¡Ni un litro más! El censo de transporte ha avanzado muy bien y sigue abierto hasta el 30 de agosto, para que todos los venezolanos disfruten del subsidio directo de la gasolina”, señaló Maduro.
El censo automotor, anunciado por el gobernante para “dar un uso razonable a la gasolina”, arrancó por Internet el 1° de agosto de 2018 y tres días después inició el registro presencial. La amenaza del aumento de la gasolina a precios internacionales hizo correr el pánico, pues solo las personas que se habían censado pagarían un precio subsidiado.
El 24 de septiembre inició oficialmente el período de prueba del nuevo sistema de cobro de la gasolina en algunas estaciones de servicio, pruebas que dejaron de hacerse con mucha más rapidez que su implementación.
Tras meses prometiendo que pronto anunciaría el aumento, el gobierno se olvidó de ejecutar la medida. Sigue manteniendo un subsidio que le es extremadamente costoso en medio de una caída de la producción y de la capacidad de ingreso de divisas. Es un secreto dónde están los dispositivos electrónicos utilizados para las pruebas del sistema de cobro de la gasolina, ni cuánto dinero se gastó en esos equipos.
Además, la escasez de combustible se agudizó en toda Venezuela desde mayo pasado. El proceso de deterioro de sistemas de transporte público también se ha acelerado en el último año. El descarrilamiento de un tren del Metro de Caracas en el túnel que conecta las estaciones Los Dos Caminos y Miranda de la Línea 1 lo evidencia, pero las fallas en el sistema son pan de cada día.
9. Consolidar la protección social
La novena promesa de Maduro fue entregar las cajas de alimentos de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) cada 15 días, y añadirles productos de limpieza y otros rubros. “Esta es nuestra novena línea: la protección social del pueblo venezolano, pensionados, hogares de la patria, mujeres embarazadas, jóvenes, discapacitados”, expresó el gobernante.
Un año después la promesa de Maduro sigue sin cumplirse. De hecho, beneficiarios denuncian que las cajas llegan con retrasos y cada vez más vacías, costosas e incluso abiertas.
Al menos en José Félix Rivas, Simón Rodríguez, La Concordia y Quebrada de Cúa el gobierno no ha cumplido con lo prometido. “A pesar de que Maduro dice que la caja tiene que llegar cada 15 días, nosotros la recibimos cada mes y un poquito más”, dijo una beneficiaria que reside en Cúa, quien solicitó el anonimato.
Y el gobierno, en vez de surtir las cajas con productos de primera necesidad, distribuyó en su programa bandera paquetes de maíz para hacer cotufas.
10. Ahorro en lingoticos y petros
Maduro propuso un plan de ahorro con lingoticos de oro de 1,5 y 2,5 gramos, además de petros. Los compradores reciben un certificado con vigencia de un año, tiempo en el cual obtendrán rendimientos. El gobierno dijo que se entregarían 1 millón de títulos, hasta la fecha se desconoce cuántos se han entregado.
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«El lingote tiene una modalidad de ahorro que está fraccionada en 10, quiere decir que usted pude comprar varios certificados y en diciembre le regala a los hijos, a los nietos, al papá o a la mamá, quizás sea el regalo de moda de las Navidades que ya se aproximan. Este es un plan para el ahorro de la familia», afirmó Maduro.
Los que han comprado petros en la sede de la Superintendencia Nacional de Criptoactivos no la tienen fácil, puesto que para poder obtener sus ahorros debe acudir a una casa de cambio.