Mujeres desplegaron sus alas en Caracas en protesta por abandono del Estado
Partidos y asociaciones exigieron al Estado que reglamenten la Ley Orgánica para Una Vida Libre de Violencia. Activistas sociales aseveran que el instrumento vigente promueve aplicaciones difusas a sanciones. solicitaron que se brinden medidas efectivas de protección a víctimas de violencia basa en género, así como la instalación de casas de abrigo, con suficientes recursos para su mantenimiento en todo el país, además de políticas claras de protección para aquellas mujeres que decidieron romper el ciclo de violencia
«Mujer, fuerza y libertad”, es la consigna con la que centenares de mujeres arrancan una marcha a propósito de celebrarse este viernes 25 de noviembre el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer.
A partir de las 9:30 am el punto de concentración, la plaza Brión de Chacaito, en Caracas, fue colmándose de mujeres con alas de mariposas en sus espaldas, realizadas en cartón, cartulina, foamy y otro tipo de materiales, como una representación simbólica de la libertad, de la vida y de que el sector no aceptará más nunca que el Estado sea cómplice de asesinatos, desigualdad y misoginia.
«Las Mariposas» era el nombre secreto usaban Las activistas políticas de República Dominicana Minerva, Patria y María Teresa Mirabal, en República Dominicana. fueron asesinadas en el 25 de noviembre de 1960, en un pueblo cerca de Santo Domingo, por orden del entonces dictador Rafael Leónidas Trujillo, debido su constante batalla para derrocar al régimen, eliminar las injusticias y frenar los maltratos hacia las mujeres. En honor a ellas, en 1999 la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer .
Los abrazos y las señas de hermandad se multiplican a medida que la multitud crece. “Ni una más”, es una de las consignas que corean entre sí y a medios de comunicación.
Dirigentes políticos, activistas y organizaciones defensoras de los derechos humanos y de la sociedad civil asisten a la convocatoria, que arranca a las 10:57 am hacia la plaza Francia de Altamira, a unos tres kilómetros del punto inicial.
“Abajo el patriarcado que va a caer. Arriba el feminismo que va a vencer”, gritan las manifestantes. Arranca la marcha y de inmediato suena la canción “Si miedo”, de Vivir Quintana.
“¡Qué tiemble el Estado!”, advierten mujeres
“Que tiemble el Estado, los cielos, las calles, los jueces y judiciales. Hoy a las mujeres que nos quitaron la calma, le crecieron alas”, corean.
En cuestión de minutos la avenida Francisco de Miranda, sentido este, se llena de gente. Algunos peatones reconocen de inmediato la actividad, otros se acercan para preguntar de qué trata, mientras que los más diestros con la tecnología y las redes sociales transmiten en vivo la caminata.
En la movilización “la abuela del casco rojo” asevera a TalCual que muchas mujeres víctimas de violencia callan porque no hay seguridad del Estado. Dice que la falta de una logística de atención adecuada le cuesta caro a las mujeres.
Comenta que son muchas las que no se apartan del victimario por no tener a donde acudir “cuando rompen con el círculo de la violencia”. Reclama al Estado por albergues y acompañamiento social y psicológico para las que son maltratadas y hostigadas.
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«La logística de atención debe existirá ¿Cómo una víctima va a estar al lado del victimario? No tienen a donde ir, dijo la «Señora del caso rojo» | Roison Figuera.A medida que la manifestación avanza se intercambian las personas que llevan la pancarta más grande. La abogada y activista Lgbti, Richelle Briceño; la exdiputada de la Asamblea Nacional (AN) Tamara Adrián —la primera diputada transexual de América Latina—; la presidenta de Primero Justicia (PJ) María Beatriz Martínez, son algunas de las dirigentes que lideran la marcha, junto a integrantes de ONG como Mujer y Vida, Uniendo Voluntades, entre otras.
Incluso, un grupo de hombres participa en la marcha, dispuesto a gritar «mujer, vida y libertad».
Violencia contra la mujer en todos los estratos
Katiuska Camargo, líder de la organización no gubernamental Uniendo Voluntades, que se enfoca en atender a ciudadanos de sectores vulnerables, relata que las zonas populares las mujeres cabezas de hogar palpan la violencia del Estado, refiriéndose a la ineficiencia de los servicios públicos y el hecho de que el salario sea cada vez insuficientes.
En referencias a la violencia intrafamiliar comenta que la mayoría de las mujeres siempre calla y que esto no tiene nada que ver con estratos, pues, “en las altas esferas y dentro de estratos de poder las mujeres son violentadas por líderes de las toldas es importante visibilizar la gran situación de violencia que hay desde la niñez hasta la etapa de adulto mayor.
“Estamos proponiendo espacios de diálogo donde las mujeres tengan un espacio seguro donde puedan comentar lo que pasa. El Estado no nos da instituciones que nos resguarden y protejan”, dice.
A las 11:52 am la movilización llega a la plaza de Francia de Altamira. Las mujeres son recibidas con aplausos por otros líderes y dirigentes que ya estaban en el lugar. Apenas terminan de organizarse comienza una ronda de discursos de las dirigentes y representantes de la sociedad civil.
La dirigente de PJ y exdiputada de la AN Marialbert Barrios es una de la líderes que toma el derecho de palabra para esbozar ante la multitud la situación de violencia que se ve en el ámbito político.
“Esto es especialmente por las que no tienen voz, las que han sido discriminadas y excluidas. Es hora de que la mujer sea libre, que pueda votar, que pueda liderar ¿Eso se ha logrado al 100%? No. Hoy hablo de los derechos políticos. El asunto de participar no puede ser simbólico, debe ser real”, exclama.
Barrios recuerda que la violencia se despliega en más de 20 formas, entre ellas la política, económica,y hasta la cibernética. “En el ámbito político somos un cuarto de los espacios de poder y no nos basta, siendo un cuarto no hay ni igualdad, ni justicia. El llamado es a sumarse a esta agrupación que no va a parar”, agrega.
En la misma línea Ibis de Franca, de Cambiemos afirma que la violencia política son todas las acciones u omisiones que, con elementos basados en género, se dan en el ejercicio. Dice que las dirigentes diariamente sufren de violencia política.
“Existen otras limitantes. Hay mujeres que somos cuidadoras. Soy una mujer que tuvo miedo que vídeos íntimos fueran divulgados en medio de una elección a la AN. Solo juntas podemos”, relata.
Exige al Consejo Nacional Electoral (CNE) que haga de cumplimiento obligatorio que los partidos tengan protocolos para evitar la violencia de género.
Ivón Parra, madre Guillermo Rueda, asesinado extrajudicialmente en 2018, dice a la multitud, que la aplaudió apenas fue presentada, que las madres venezolanas son víctimas del sistema patriarcal.
Recuerda que en 2017 “grupos de exterminio” asesinaron a su hijo y hasta ahora no ha tenido justicia. Asevera que el Estado se burla de los más necesitados y que ser joven es un delito y una pena de muerte, al igual que pensar diferente y protestar.
Otro de los sectores que dice presente en la movilización fue el de salud. Ana Rosario Contreras, presidenta del Colegio de Enfermeras de Caracas. Agrega en su derecho de palabra que las mujeres trabajadoras del gremio son víctimas de violencia cuando el estado las señala de ser responsables de la crisis de hospitales.
Advierte que hay depresión en la comunidad por el hecho de trabajar, pero aún así no tener alimento en sus hogares. “Llamamos al gobierno para que establezcan políticas que garanticen la protección de la mujer venezolana”, añade.
Exigencias de las mujeres
La movilización culmina casi a la 1:00 pm. Antes de finalizar los partidos y asociaciones exigieron al Estado que reglamenten la Ley Orgánica para Una Vida Libre de Violencia, pues afirman hay ambigüedades en cuanto a la sanciones hacia los victimarios. .
Solicitan que se brinden medidas efectivas de protección a víctimas de violencia basada en género, así como la instalación de casas de abrigo, con suficientes recursos para su mantenimiento en todo el país, además de políticas claras de protección para aquellas mujeres que decidieron romper el ciclo de violencia.
Piden establecer en centros educativos, protocolos de conducta, programas y talleres para la prevención de violencia basada en género, y se garanticen espacios libres de discriminación. La misma solicitud es elevada a las empresas.
“A los medios de comunicación le pedimos un llamado a la sensibilidad para tratar de forma responsable los casos de violencia y promover la importancia de la participación de la mujer en planes de desarrollo que generen bienestar a la población”, piden.
Se les solicitó a los medios acompañar las exigencias de las mujeres y difundir contenido con perspectiva de género.