Odebrecht también dejó casas muertas en Venezuela
Odebrecht también dejó casas muertas en Venezuela. El incumplimiento en la construcción de 2.400 viviendas provocó el primer juicio en nuestro país contra la constructora brasileña
Odebrecht está a las puertas de su primer juicio en Venezuela. Una demanda interpuesta por la Compañía Anónima Metro de Caracas contra la empresa brasileña cursa ante el Juzgado de Sustanciación de la Sala Política Administrativa del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), a cargo de la magistrada Belinda Paz Calzadilla.
De acuerdo a un trabajo de investigación realizado por el portal armando.info, se trata de la primera y única acción judicial contra la constructora en la trama venezolana del ya célebre escándalo Lava Jato.
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La Procuraduría General de la República ya ha advertido que la empresa brasileña no concluyó once obras de gran envergadura para la que fue contratada durante los gobiernos de Hugo Chávez. Pero hasta ahora solo es por el incumplimiento en la construcción de 2.400 viviendas –cotizadas con un exorbitante sobreprecio y proyectadas en un terreno no apto para construir- que la constructora enfrente a la justicia en Venezuela, país en el que, solo después de Brasil, Odebrecht admite que repartió el mayor monto en sobornos: al menos unos 98 millones de dólares en coimas.
Odebrecht también dejó casas muertas
Apenas fue el reciente miércoles 7 de agosto cuando se celebró una audiencia judicial de un caso de Odebrecht relativamente desconocido. En esta primera batalla, el resultado fue desfavorable para el demandante: El tribunal ordenó al Metro de Caracas subsanar errores en la demanda, ya que la compañía no determinó ni probó el monto del daño que la gigante de la construcción había ocasionado al Estado por el incumplimiento en la construcción de 2.400 viviendas a edificar en un terreno ubicado en Mariches, municipio Sucre del estado Miranda.
Por su parte Odebrecht rechazó la acusación alegando que con el anticipo recibido sí ejecutó parte de los compromisos. Al hacer la declaración ante el tribunal, la empresa optó por reservarse las pruebas, las que parecen sermuy necesarias puesto que una visita al sitio donde se levantarían las viviendas muestra, a simple vista, que no hay más que maleza y maquinaria abandonada.